Lo maravilloso de Madrid es que existe un Madrid para todos los gustos, donde estar en el centro de la ciudad, con todo lo que eso conlleva: la inmensa oferta cultural, las infinitas propuestas de ocio, una temperatura suave y una gastronomía envidiable; mientras que, a pocos kilómetros del centro de la ciudad, es posible disfrutar de rincones únicos.
Madrid conserva enclaves inolvidables en los que descubrir la historia - declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO, villas medievales, fortalezas, monasterios, una gran variedad de paisajes y experiencias turísticas singulares. Un territorio donde descubrir, por ejemplo, raíces sefarditas en Alcalá de Henares –que este año conmemora el 25º aniversario de su declaración como Patrimonio Mundial-, al recorrer lo que fue la judería alcalaína en la Edad Media.
Un destino donde recorrer pueblos mimetizados con el paisaje: pueblos blancos de la Alcarria que se funden con los campos de cereales y olivos; y pueblos serranos construidos con granito, pizarra y madera. Naturaleza y ruralidad se combinan en este destino donde conocer los orígenes de sus tradiciones, compartiendo experiencias con sus habitantes, que no cesan en su empeño de mantenerlas vivas.
Alegre, abierta, diversa y sorprendente, la Comunidad de Madrid regala una experiencia de viaje única: descubre una sociedad moderna, viva y optimista. Disfruta de su rica historia, su variada oferta cultural, su excelente gastronomía, su sorprendente naturaleza.